La sonrisa y rostro casi infantiles no permiten distinguir a primera instancia la madurez con la que observa la vida y el futbol, David Israel Ávalos Toro, se ha tenido que enfrentar a muchas situaciones, que a su corta edad han forjado en él un carácter tenaz y decidido, que siempre ha contado con el apoyo de su familia para seguir sus sueños sin rendirse ante las adversidades.
"Mi familia está conformada por mi papá, mi mamá y tengo tres hermanos, uno mayor que ya es casado y ya tiene una hija, mi hermana, después mi hermano Diego que tiene 20 años, que es con quien me la llevó mejor, de hecho jugué un año con él en la Tercera División de Atotonilco, yo que soy el más pequeño de la familia. Soy originario de aquí de Guadalajara, Jalisco, toda mi vida viviendo donde mismo, en el Colli urbano, llevó los 17 años de mi vida viviendo ahí, pero mis papás son originarios de Michoacán, de Cojumatlán.
"Mi familia es la que me ha apoyado toda mi vida que llevo en el futbol y nunca me ha faltado el apoyo de ellos gracias a Dios, y a donde pueden ir a verme jugar van, y si no, llevó sus vibras en mi corazón y eso es lo que me ayuda salir adelante", expresó con mucho orgullo el delantero rojiblanco.
También la inquietud por jugar futbol tiene su origen en su familia, pues su padre también fue jugador profesional de Segunda División, y David comenzó a dar muestra de su habilidad desde muy pequeño, pues a los cinco años ya estaba en una escuela de futbol, y ahí comenzó el sueño de algún día poder debutar en la Primera División.
"Me la inculcó mi papá (la inquietud por el futbol), porque él también fue un jugador profesional llegó a Segunda División, pero por una lesión quedó fuera, pero desde muy pequeños a mi hermano y a mi nos ha gustado el futbol y yo empecé a los cinco años en una escuela en el futbol y de ahí empezó el sueño de querer llegar a Primera División. Mi papá jugó en la Segunda División de Zamora (Michoacán) cuando sólo había Segunda y Primera División, perdió una final para ascender contra el Unión de Curtidores", expresó.
El juvenil atacante del Rebaño Sub 17 evocó los primeros pasos que dio en el futbol, y los equipos que formaba en la primaria con su compañero en equipo rojiblanco Luis Márquez, para comenzar a competir desde temprana edad y tener la ilusión de algún día poder llegar al Máximo Circuito del balompié nacional.
"Recuerdo que en la casa donde vivimos hay un jardín y ahí me ponía a jugar con mi pelota, la pateaba y desde muy pequeño ya empezaba el gusto por el balón. Recuerdo que cuando más jugaba era en la primaria, ahí con mis amigos en el receso, siempre hacíamos partidos, yo tenía un equipo y Luis Márquez que es compañero mio en la Sub 17 también armaba el suyo, nos conocemos desde que tenemos seis años, teníamos nuestra rivalidad y desde ahí empezó el sueño y resultó que nos topamos aquí en Chivas", relató el jugador del equipo Sub 17 de Chivas.
Forjado por la perseverancia
David Ávalos comenzó muy pequeño la práctica del futbol, pero fue después de tres años de preparase en una escuela que su padre lo llevó a hacer unas pruebas a Chivas y gracias a su talento fue elegido por los visores del Rebaño a la edad de ocho años, pero luego de cuatro años de estar en Fuerzas Básicas, fue informado que debería dejar su lugar para pulir sus condiciones en la Escuela de Chivas La Gigantera, pero su perseverancia lo llevó a no dejar de luchar por alcanzar sus sueños.
"Mi primer equipo fue una escuela de Cruz Azul que esta ahí por Palomas y ahí duré tres años, luego mi papá se enteró que iba a haber pruebas aquí en Chivas y decidió traerme y gracias a Dios me eligieron. Llegué más o menos en la temporada 2003-04, tenía ocho años, iniciamos jugando una Copa Chivas y duré cuatro años hasta que me mandaron a la Escuela de Chivas y duré dos años. Mi primer técnico fue Eugenio, me acuerdo que era un gran entrenador, muy estricto, pero nos ayudó mucho para salir adelante, éramos sólo unos niños que íbamos empezando, nos sirvió mucho ese profesor.
"Empecé desde las inferiores, la Octava, Séptima, Sexta, Quinta, hasta Cuarta, y ahora gracias a Dios debuté en el Sub 17 y lo he hecho bien. Cuando me mandaron a la escuela a la Gigantera yo no bajé los brazos y seguí luchando, de hecho en esos dos años que estuve en la Escuela me llamaron para hacer pruebas cada seis meses y siempre tenía la mala suerte de regresar, de hecho una vez me llevaron al torneo Sub 15 en el 2010, y era como mi prueba para quedarme, pero desafortunadamente no hice un gran papel, cuando llegamos de ese torneo me volvieron a mandar a la Escuela" reseñó el jugador del equipo tapatío Sub 17.
Durante el proceso de formación que ha tenido el hábil delantero tapatío, ha participado en algunos torneos internacionales, que según su consideración le han servido para adquirir experiencia dentro del terreno de juego y empezar a conocer lo que son las concentraciones y el tener que jugar ante rivales de otros países y diferentes estilos de juego.
"El que más recuerdo es este que acaba de pasar, la Copa Independencia Sub 17 que para mí fue un excelente torneo en el que se me dieron las cosas muy bien gracias a Dios, y un sueño para mi jugar en el estadio Azteca y enfrentarme a rivales tan grandes como el Barcelona.
"En Texas, fue donde más íbamos de pequeños con la institución, y me tocó ir a McAllen, Dallas, Austin, Houston en dos ocasiones. Eso nos ayuda para desde pequeños ir trascendiendo para ir viendo lo que es el sueño de Primera División, te enfrentas a rivales de otros países con diferentes estilos de juego, y es lo que te va dando experiencia para llegar a ser un excelente jugador", refirió.
Una etapa que el delantero considera que fue fundamental para su regreso a las Fuerzas Básicas rojiblancas fue la que tuvo en el equipo de Tercera División de Atotonilco, Jalisco, en el que tuvo la oportunidad de ser titular y jugar dos Liguillas buscando el ascenso, pero fue gracias a sus destacadas actuaciones que recibió nuevamente la oportunidad de volver al conjunto tapatío.
"Antes de pasar a la Escuela y regresar aquí pasé un lapso de dos años en la Tercera de Atotonilco, en la que me fue muy bien gracias a Dios, tuve un gran papel como menor y como mediano, la mayoría de los partidos fui titular y jugué dos Liguillas, nuestro objetivo era ascender a Segunda División, pero no se logró, pero gracias a mis actuaciones ahí fue que Chivas me dio otra oportunidad, no la desaproveché y fue que regresé.
"Mi primer partido fue contra Morelia, jugué 15 minutos, ganamos 4-1, recuerdo que ese día iba a meter un gol, desafortunadamente el balón pegó en el poste, pero de ahí el profe Manolo (Martínez) me empezó a dar la confianza y en la Copa Independencia fue donde más destaqué y donde me hice de la titularidad. Al principio sentí algo de nervios, es tu primer partido, tu debut, y se siente al igual que los nervios una gran alegría que ya vas a competir en otra categoría y eso te ayuda para ir mejorando y se sabe que de Sub 17 se puede dar el brinco a Primera División" apuntó entusiasmado Ávalos Toro
Caracterizado por un especial carisma dentro y fuera de la cancha, posee una gran velocidad y habilidad en su pierna izquierda, el joven atacante de escasos 17 años ha sabido superar los adversidades que se le han presentado por su baja estatura, pero como él dice que eso no ha sido problema para poder desarrollarse y tiene como ejemplos a Diego Maradona y Lionel Messi, quienes han destacado y tenido grandes logros a nivel mundial.
"Soy un jugador muy chaparrito, pero que le gusta encarar ser descarado y sobre todo tiene una gran velocidad que lo caracteriza. El futbol es para hombres como se dice, y la estatura para mi no ha sido un obstáculo, he sabido cargar con eso, tengo varios ídolos y ejemplos a seguir como lo es (Lionel) Messi, (Diego) Maradona, jugadores muy bajitos pero que han hecho grandes cosas en sus clubes y en sus selecciones y es la motivación que tengo", dijo con seguridad David Ávalos.
Presente halagador y sueños por cumplir
El equipo Sub 17 marcha como líder del Apertura 2012 de manera invicta en ocho jornadas que se han disputado, y el ariete rojiblanco señaló que es producto primero de un gran grupo que conforma este plantel, trabajo que realizan día a día y la actitud de no darse nunca por vencidos, aunque reconoció que en su regreso le costó trabajo adaptarse a las actividades paralelas que reciben como parte de su preparación en la cantera tapatía.
"Es un gran equipo, muy unido con excelentes jugadores sobre todo el invicto que llevamos es gracias al trabajo de día a día y la actitud del equipo que nunca se rinde y a pesar de en ocasiones ir abajo en el marcador, da la cara y logra dar la vuelta.
"Me costó trabajo adaptarme al aspecto físico, porque son muy diferentes los trabajos de aquí a los que venía realizando en Tercera División, es más exigencia y aquí ya te cuidan la dieta, nutrición y tenemos más áreas de trabajo como es Desarrollo Humano o Yoga y eso es algo que te ayuda como persona para salir adelante.
Su futuro lo vislumbra paso a paso, primero cumplir con los procesos de Fuerzas Básicas, y en el momento adecuado buscar el debut en la Primera División, que sería el primer paso para lograr un sueño más trascendente como lo es jugar un Mundial con la Selección Mexicana y pertenecer a un club europeo.
"Primero que nada hacer un buen papel en esta categoría y lograr un llamado a las selecciones menores, esperemos que con buenas actuaciones lo logre, pero si no a seguir luchando por el sueño que es estar en Primera División y tratar de seguir aquí, cumplir los procesos y en el momento que sea el adecuado lograr el sueño que es debutar. La constancia y ser mejor cada día, dar el máximo esfuerzo en cada entrenamiento, mejorar y apoyar a tus compañeros, a tus entrenadores, recibir sus consejos y tomarlos con gusto y exigirse conscientemente uno mismo día a día.
"Mi mayor sueño sería jugar un Mundial con la Selección Mayor, quedar campeón y jugar en un equipo de Europa, tal vez en un Barcelona o el Arsenal, en grandes equipos que son instituciones que son ejemplo a seguir", aseveró.
Como un adolescente normal, así es como se define fuera del terreno de juego, que le gusta salir con los amigos, le gusta la música y empieza a sentir atracción hacia el sexo femenino, pero aseguró que nada de esto lo distrae de su principal objetivo que es el futbol, y agregó que tiene una gran debilidad por la comida que prepara su mamá, y que es lo único que le hace romper la dieta que tiene que llevar, pues no se puede resistir a las muestras de amor de su madre.
"Como todo adolescente me gusta salir con los amigos, la música, las muchachas, pero a lo que más se enfoca uno es al futbol, los video juegos es algo que me distrae mucho pero yo prefiero ver la televisión a los video juegos.
"Lo que más se antoja es el pan, como a mi mamá le gusta cocinar mucho, hace muchos panes caseros y todo eso, entonces ahí es donde se rompe la dieta, por más que se quiere uno resistir no se puede resistir a la comida que hace la mamá con tanto amor y sabe mejor que algo comprado en la tienda", finalizó el delantero del equipo Sub 17 del Guadalajara, David Ávalos.