El título conseguido en la Copa del Mundo Sub 17 en Perú 2005, donde se convirtió en el primer jugador mexicano en levantar un trofeo de Campeón en una Copa Mundial de la FIFA, le dio a Patricio Araujo el impulso para dar el salto hacia la Primera División y debutar con Chivas frente al Morelia, el 29 de octubre de 2005.
A siete años de distancia de aquella presentación con Guadalajara en el Máximo Circuito, el originario de Colima está firme como contención del equipo tapatío, con más de 200 partidos en la categoría, que lo convierten en un elemento experimentado a sus 24 años de edad, ya que desde los 13 años inició una carrera profesional en su ciudad natal.
La energía con la que disputa cada balón para transmitir su pasión por los colores rojiblancos, contrasta con su carácter noble fuera de la cancha, donde disfruta pasar el tiempo con su familia, sus amigos y su nueva mascota un mono hembra llamado ‘Panchita’; además de continuar sus estudios en la licenciatura en administración de empresas para estar muy bien preparado cuando concluya su carrera como futbolista.
Con un campeonato en el Torneo de Apertura 2006 y logros muy importantes como el subcampeonato en la Copa Libertadores de América 2010, el ‘Pato’ quiere conseguir más éxitos con las Chivas para proyectarse hacia la Selección Mayor y dejar en alto el nombre de la institución que le permitió llegar a ser un jugador de Primera División.
Hace siete años debutaste en Primera División tras el título en el Mundial Sub 17, pero ¿es cierto que ya eras profesional desde la adolescencia?
“A los 13 años debuté en Tercera División, en aquel entonces jugaba contra gente de 22 ó 23 años, y gracias a Dios me tocó ser titular con ese equipo con el profesor (José Antonio) Panduro. Posteriormente llegó una franquicia de Segunda División a Colima, llamada Volcanes, me tocó estar con el profesor (Jorge) Correa y fue donde me vio Chivas.
“Fue un partido de exhibición en el que se recaudaron fondos por el temblor que hubo en el 2003 en la Ciudad de Colima, que quedó devastada. Hubo mucha gente damnificada por eso se dio ese partido y por esa desgracia en la Ciudad de Colima a mí me tocó la fortuna de jugar contra Chivas de Primera División y que me pudieran ver, fue así como llegué aquí al club”.
Si a los 13 años ya eras profesional, ¿desde que edad comenzaste a practicar el futbol?
“Yo empecé a jugar en el colegio, de los cinco a los 12 años, que fue cuando ya no hubo equipo para competir, porque los demás compañeros empezaron a hacer otras cosas y no nos completábamos, quedamos como cinco o seis jugadores, de ahí ingresé a una escuelita de Atlas comandada por Leoncio Morán.
“A los seis meses me subieron a la Tercera División, jugué el Torneo del Sol con 13 años, mientras que los demás ‘chavos’ tenían 15, era un preselectivo para la Sub 17 que traía (Humberto) Grondona, fue ahí que Enrique Contreras me recomendó con Jesús Ramírez, le dijo que no había quedado yo para ese preselectivo, pero que le interesaba que tuviera continuidad por la edad y así fue como me di a conocer allá. Ingresé de 13 años a lo que fue la Sub 15, desde esa edad conozco a ‘Chucho’”.
Para los padres lo más importante que tienen un hijo a sus 13 años esté dedicado a sus estudios, ¿cómo combinabas tus estudios de secundaria con el futbol?
“Empecé a viajar desde los 13 años, todos mis compañeros me decían ‘estás viajando cada fin de semana, que padre’, era algo muy diferente a las actividades que hacían mis demás compañeros de escuela. Desde ese entonces empecé con esas actividades, pero nunca aflojé en la escuela.
“Siempre mantuve mi vista en que tenía que terminar mis estudios de secundaria y cuando me surgió esta invitación por parte de Chivas, yo terminaba mi ciclo escolar de tercero de secundaria y dije ‘ya me puedo ir tranquilo’, porque me ofrecían continuar la prepa en Educare y no dudé en tomar esta oportunidad, porque al igual que me daban la oportunidad de estar en un equipo de Primera División, me daban la escuela y no dudé en tomar esta carrera”.
A los 13 años estudiabas la secundaria, jugabas al futbol profesional, ¿también ayudabas en la florería que tiene tu familia?
“Desde los seis años he apoyado en mis papás en la florería, de hecho se acerca una fecha como es el dos de noviembre, el cual es un día grande de venta, si tengo oportunidad de asistir para ayudarlos ahí estaré. No me limito a no ayudar en la casa, todo lo que hago en esos días es para satisfacción mía porque sé que mis papás están muy contentos al tenerme allá y que mejor que les pueda ayudar en algo, en lo que he vivido rodeado toda mi vida”.
¿En qué labores les ayudas?
“Yo les ayudo en el trabajo pesado, cargar cajas de flores, meter la flor en agua, acarrear las cubetas llenas de ramos, preparar las armazones tipo carpas para poner ahí las flores y venderlas, gracias a Dios no nací penoso, creo que por mi mamá, y me pongo a gritar en la pasada de la gente al panteón ‘a 20, lleve su ramito a 20’, así estamos ofreciendo nuestro producto a todas las personas que pasan por ahí”.
Cuando terminaste la prepa ya eras jugador profesional, ¿qué te impulso a continuar los estudios si ya tenías un buen sueldo y reconocimiento?
“Lo que me ha motivado para seguir en esto es la preparación que he visto en todos mis compañeros, la mayoría ya se recibieron y es algo que comparto con ellos, desde chicos compartimos ciertas ideas de que materias nos gustaban, que eran lo que queríamos hacer, obviamente yo me enfoqué mucho más en el futbol, pero a todos ellos les dije que yo también quería terminar mi carrera.
“La inicié igual que ellos de 18 años, pero tuve que parar por motivos de Selección, por exceso de trabajo, fue lo que me mantuvo un poco al margen, pero ahora que tuve la oportunidad de regresar a la carrera espero poder terminarla lo más pronto posible y más allá de terminarla, aprender lo más que pueda”.
Después de tu carrera como futbolista, ¿te visualizas dentro o fuera del ambiente del futbol?
“Me encantaría continuar dentro del futbol porque es mi vida, pero si no se da la oportunidad, que lo que me interesaría más sería la preparación física, si no me enfoco en eso, ya hasta que Dios me dé licencia para jugar, estoy pensando poner una empresa por cuenta propia o seguir con la florería de mis papás, que es algo que tengo en la mente y es algo que nadie me lo va a quitar, es algo que ellos han mantenido durante treinta y tantos años, no pienso romper esa tradición y quiero seguir con ese negocio. Si podemos poner algo más que sea rentable, lo haremos”.
Entre tantas actividades ¿qué te gusta hacer en tu tiempo libre?
“Mi tiempo libre allá en Colima prácticamente es ir de cacería, cuando tengo oportunidad ir de cacería todas las mañanas, incluso si hay en las tardes también, ayudarles a mis papás en la florería y salir a comer con ellos, es lo que más hago allá y lo que más disfruto, aparte de jugar futbol".
En siete años en Primera División, ¿cuál sería tu balance personal?
“Me siento muy satisfecho con lo que he logrado, aunque hay cosas que se me han ido de las manos, como los Juegos Olímpicos (en 2008), que me hubiera gustado poder jugarlos, el campeonato de la Sub 20 (en 2007) también fue de las primeras experiencias de mi carrera, tenía muchas expectativas de ser Campeón en ese torneo, un autogol nos dejó fuera contra Argentina, ese 1-0 desafortunado.
“Pero estoy muy contento, muy satisfecho y ahora lo que viene, en lo que tengo oportunidad de participar en Selección Mayor es uno de mis sueños, y porque no, si se da la oportunidad salir a algún equipo europeo, sería una experiencia muy buena”.
Alguna vez sonó que había interés en ti en el futbol de Holanda, ¿qué tan cierto fue?
“Hubo comunicación, mi representante es el encargado de que se dé esa información, y él es el que me dice, mientras no me diga él y se escuchen rumores no estamos seguros de nada, pero estamos tranquilos en ese aspecto, igual hay que seguir trabajando aquí en el club, yo estoy bien enfocado en mente y corazón en lo que es Chivas”.
Eres un jugador fijo en el equipo titular de Chivas, con más de 200 partidos en Primera, ¿por qué todavía no has recibido el reconocimiento pleno como un jugador de experiencia?
“Yo siento que un poco el carácter, mostrándolo gritándole o hablándole a los compañeros, de repente sí lo hago, pero yo siento que es algo que me falta para darme un poco más a notar, meter goles yo creo que también sería importante empezarlo a hacer (con más frecuencia).
“La actitud, el esfuerzo, las ganas dentro de la cancha, de eso nadie se puede quejar, inclusive yo que soy el principal critico de mi actuar, mientras yo meta, corra y haga las cosas lo mejor que puedo, yo siento que en eso ayudo mucho al equipo y es algo que toda la gente identifica de mí, el recuperador de pelotas, pero si algo quedo a deber es comunicar más dentro de la cancha, transmitirle a todos mis compañeros mis ideas con la boca porque con acciones estoy seguro que ellos me ven y se motivan.
“Ese extra es necesario dentro de la cancha, me lo ha dicho Alberto Coyote, me lo ha dicho gente de experiencia, Camilo Romero, otros jugadores que han sido muy reconocidos dentro del equipo como Claudio Suárez, personas con las que he platicado, esa es una de las cosas que no tengo que aprender, más bien ponerla en práctica”.
Esa intensidad contrasta con tu carácter noble fuera de la cancha, ¿cuáles son los momentos de mayor satisfacción al convivir con los aficionados?
“Me ha tocado visitar a personas que tienen algún padecimiento en su cuerpo, desde el momento en que ríen al platicar con ellas, eso no lo cambias por nada; esas experiencias son las que me han marcado o que lleguen personas y digan ‘yo pensé que eras sangrón’, después te conocen y digan lo contrario, es una de las satisfacciones más lindas que hay dentro del futbol”.
Eres una persona sana, comprometida con su profesión, ¿qué te falta para lograr esa satisfacción plena?
“Estar en cada torneo en los primeros lugares, yo creo que es algo que le hemos quedado a deber a la institución y sobre todo otro campeonato, yo sueño y no veo muy lejos que podamos pelear por un campeonato, porque veo los partidos, las jugadas y me meto en la cabeza que tenemos un gran equipo, todos corremos, nos hace falta ese pequeño detalle de meter más balones dentro de la portería, es el único detalle que nos falta.
“Yo siento que ningún equipo ha pasado por encima del Rebaño y eso nos lo tenemos que quedar todos nosotros, de que podemos, que somos capaces, tenemos grandes cualidades, sólo hace falta demostrarlo partido a partido, con dos o tres goles, somos de los equipos menos goleados, es muy raro que nos hagan más de dos goles, hemos perdido con diferencias de uno, pero vamos a tratar de arreglar eso”, concluyó.
Fotos: Simon Barber