En medio de un ambiente de entusiasmo por continuar en la contienda por el título del Apertura 2013, el conjunto de Chivas Sub 17 tuvo este lunes una sesión de entrenamiento con miras al primer encuentro de la Gran Final de la categoría contra los Tuzos del Pachuca.
Como es habitual al día siguiente de un partido oficial, el Cuerpo Técnico del juvenil Rebaño programó una práctica con trabajo diferenciado para los jugadores, en consideración a los minutos jugados, para mantener a todos los elementos del plantel en las mejores condiciones físicas y futbolísticas.
El entrenamiento comenzó en punto de las nueve de la mañana con una dinámica de torito, en la cual quedó de manifiesto el buen ánimo que existe entre los integrantes de la escuadra rojiblanca, pues al acumular 20 pases ininterrumpidos, los jugadores que estaban dentro del círculo establecido para circular la pelota, recibían un pequeño “castigo” de sus compañeros.
Tras esta actividad recreativa, los jugadores que disputaron una mayor cantidad de minutos ante el América llevaron a cabo labores regenerativas, las cuales consistieron en trote alrededor de las canchas de Verde Valle, además de una sesión de hidromasaje, con el objetivo de lograr la adecuada recuperación física para enfrentar al Pachuca.
Por su parte, el resto de los jugadores del equipo dirigido por Ramón Morales llevó a cabo un trabajo complementario para estar en el mejor ritmo futbolístico en caso de ser requeridos por el estratega rojiblanco en el primer juego de la Final, en la cual Guadalajara buscará su tercer título en la categoría Sub 17.
El trabajo complementario consistió en un ejercicio técnico enfocado a mejorar en el golpeo y recepción del esférico con ambos perfiles y en un ejercicio de futbol en espacios reducidos para mantener la intensidad en los elementos con menos minutos disputados en los más recientes partidos.