El panorama no era nada alentador hacia la recta final del primer tiempo de la Vuelta en la Gran Final del Apertura 2013 en la cancha del Estadio Omnilife, pues Guadalajara Sub 17 caía 0-3 ante los Tuzos y todo presagiaba que el campeonato para los dirigidos por Ramón Morales se les escapaba de las manos, aún y cuando en el global tenían un gol que les daba cierto aliento.
Fue hacia los 40 minutos, Juan de Dios Agüayo apareció dentro del área para meter un derechazo que se anidó en el fondo de las redes de los Tuzos y que con ello, los incitaba a que sólo fueran por un gol para forzar a la prórroga en la disputa por el título.
Pero tras el gol de Ángel López, el cual concretó a los 44', justo antes de que el árbitro decretara que se fueran al descanso, lo hecho por el Rebaño juvenil de emparejar el global a tres tantos por bando hacía que el segundo tiempo se antojara aún mejor, pues era sólo un gol lo que deparaba a los rojiblancos del tan ansiado título.
Y pese a que en el partido había ya un antecedente de un penal fallado, el cual erró Marco Granados a los seis minutos de partido, una falta sobre Carlos Zamora hizo que Chivas Sub 17 tuviera el campeonato desde los once pasos. Y esta vez fue Juan de Dios Agüayo quien se echó la responsabilidad de cobrar, a los 81' disparó con colocación e hizo estallar al Estadio Omnilife con el Gol, el Cielito Lindo y los coros de "Campeón".
"Es lo mejor que me ha pasado en la vida", señaló Juan de Dios Agüayo ya con el trofeo en la mano y las lágrimas de felicidad en los ojos, rodeado por su equipo y también por sus familiares, "es la mejor experiencia que he tenido y también lo que mejor se siente después de haber hecho un gran esfuerzo durante el partido.
"Nunca bajamos los brazos,. logramos reponernos de un marcador en contra y lo hicimos con motivación, con unión y más que nada con alegría. Al momento de tirar ese penal no pensé en nada más que en la portería y en meterla; fue una alegría tremenda al ver que lo convertí y sentí algo que simplemente no lo puedo explicar", continuó Juan de Dios Agüayo en medio de lágrimas.
Con la desventaja que tuvieron en el encuentro, el defensor de Chivas destacó que el equipo nunca bajó los brazos pese a verse abajo en el marcador, y aunque era una encomienda difícil el remontar un 0-3, la determinación del equipo y la unión de grupo los supo sacar a flote para poder levantar el título de Campeones del Apertura 2013.
"Estaba muy difícil el partido, pero supimos sobreponernos y afortunadamente se nos dio. Nunca nos pasó por la mente que se nos iría el título, yo personalmente tenía en la cabeza de que íbamos a sacar el partido de la manera que fuese, y con base en el trabajo y a no dejarnos caer así se nos dio el ganar.
"Mis familiares me han dicho que se sienten muy orgullosos de mi, y que también están muy felices de lo que hemos logrado, por lo que me da mucha más satisfacción el que hayamos podido conseguirlo como equipo y para la institución", finalizó el autor del primero y tercer gol del partido para Chivas, que encaminaron al equipo a la consecución de este título de Apertura 2013.