Su filiación rojiblanca la trae por tradición, miembro de una familia en la que los colores rojiblancos los tienen tatuados en el corazón, el joven portero del Guadalajara Sub 17, Alejandro Manuel Cruz Vidrio recuerda como fue su infancia, en la que desde muy pequeño le fue inculcada la pasión por el equipo más popular y querido de México, Las Chivas Rayadas del Guadalajara.
“Soy de Guadalajara, nací por el centro, y ahora vivo por la colonia del Fresno. Mi familia es muy futbolera, todos Chivas de corazón y desde chico mi tío tenía una academia de futbol, de llamaba Chivas Hidalgo y ahí estaban todos mis primos, me acuerdo que desde los cuatro años siempre he sido portero, mi mamá me dice que solo me gustó, me puse los guantes y me gustó ser portero. Salía de la escuela y nos íbamos a la academia toda la tarde hasta pasaditas las 10 de la noche regresábamos a al casa, estuvo muy bonita época con mi familia, todos juntos, me gustó mucho.
“Aquí (en Chivas) estuvo mi primo que es mi padrino también, Lauro Muñoz, hace unos siete años y otro que estuvo muy poco tiempo que se llama José Manuel, y tenemos tendencia de ser porteros en la familia. (Lauro) ha sido de las personas más importantes para mí en este proceso, él para mí, aunque no se lo digo, ha sido un ídolo, un ejemplo para mí, él me ha enseñado que cuidarse, no ir a fiestas, aprovechar el lugar en el que estás, a dar todo en los entrenamientos, a no darse por vencido, porque para él si ha sido difícil y sigue intentando buscar su sueño y es lo que a mi me motiva de él”, evocó.
Dentro de su formación en Fuerzas Básicas del Guadalajara, el guardameta rojiblanco tuvo la oportunidad de participar en torneos internacionales, mismos que le dejaron un gran aprendizaje y que espera poder aplicar todas las experiencias que adquirió en su trabajo en el equipo Sub 17 de Chivas.
“Me acuerdo de una gira que fuimos a Europa a tres países, Suecia, Dinamarca y Noruega, tengo muchos recuerdos bonitos porque fue un mes estar lejos de la familia y estábamos chicos, teníamos 13 años, nos trajimos los tres torneos, pero estar ahí con los compañeros son cosas que nunca se olvidan.
“En Brasil fue un torneo muy difícil, no nos tocó calificar pero aprendes muchas cosas, subes tu nivel futbolístico, la Copa UC en Chile ahí fueron selección y la experiencia te ayuda mucho a la hora de llegar aquí”, aseguró.
El proceso de formación que ha llevado el juvenil guardameta ha sido similar al de otros elementos de la cantera rojiblanca, él llegó a la escuela de futbol La Gigantera en el 2006 y de ahí fue seleccionado para formar parte de la categoría 1997, y a partir de ahí su camino no ha sido nada fácil, pero el apoyo de su familia y sus instructores fue fundamental para no rendirse en la búsqueda de alcanzar la Primera División.
“Llegué a Gigantera, estuve un año ahí, en la selección, y un día me llamó Diego Martínez y me dijo que había pruebas para formar la categoría 97 y de ahí me tomaron en cuenta en el 2006. Me tocaron momentos difíciles porque hubo un tiempo en el que no sabía si iba a seguir aquí en Chivas o no, porque te das cuenta del nivel, pero platiqué con mi familia y me dijeron que aprovechar, que no estaba en cualquier parte, y también con mis profesores, de ahí me puse la pilas y es lo que me ha ayudado poco a poco para ir ascendiendo para llegara a Primera División.
“(En Cuarta División) fue un buen proceso porque fuimos invictos en el torneo, perdimos la Final, pero fue un buen torneo porque desde el trabajo se fue conformando un buen grupo, aprendí muchas cosas, tenía 14 años. En Tercera me tocó debutar con ‘Choco’ (Heriberto Padilla), me acurdo de ese partido contra Coras, me fue mu bien, paré un penal, y el siguiente año cuando nuestra categoría era de Tercera (División) me tocó estar con la Sub 17”, compartió el arquero Sub 17 de Chivas.
Cruz Vidrio es consciente que la posición en la que se desempeña es la más competida y en la que el Rebaño Sagrado ha tenido grandes figuras a través de su gloriosa historia, desde Jaime ‘Tubo’ Gómez, pasando por Ignacio Calderón, Javier ‘Zully’ Ledesma, Oswaldo Sánchez, Luis Michel y ahora José Antonio Rodríguez por mencionar algunos, pero espera cumplir su sueño de jugar en el Máximo Circuito del Futbol Mexicano y trascender.
“Me acuerdo que yo veía a Oswaldo Sánchez y decía ‘yo quiero estar ahí’, iba a ver desde chico los partidos, quiero estar ahí para que me aplaudan o me abucheen, lo que sea, pero estar ahí y par mí siempre ha sido lo máximo estar en Chivas y ser algo importante en la institución.
“Me acerqué con Miguel Jiménez primero y luego con Toño Rodríguez, él me dio muchos consejos muy buenos, venía el de ser campeón olímpico y dije ¿por qué no?, se abrió mucho, me dio muchos consejos de ser buen compañero, esforzarte, aunque seas el tercer portero todos están parejos y puedes llegar a ser el primero, me contó que siempre le ha tocado así y de ahí no soltar, fue lo que me quedó grabado”, comentó.
La familia es el principal motor del guardameta Sub 17 del juvenil Rebaño y buscará darles la satisfacción de llegar a jugar en el Primer Equipo del Rebaño Sagrado, además que él disfruta y se divierte cada vez que se pone los guantes para defender los colores rojiblancos.
“La principal jugar, divertirse, me doy cuenta que a veces el futbol ya es parte de nuestra vida, trato de cuidarme para estar bien, pero también lo disfruto mucho cuando estoy en la cancha, lanzarme y todo eso me agrada y creo que esa es la motivación, simplemente el jugar.
“Mi familia es Chiva de corazón y pienso como estaría mi familia viéndome jugar en Primera (División), en selección, a mi me da eso fuerzas para seguir adelante”, afirmó.
Ser parte del plantel Sub 17 de Chivas representa para el joven cancerbero una gran oportunidad para mostrarse y buscar superarse, pues uno de sus objetivos es ser convocado a la Selección Nacional de la categoría, pero sabe que la competencia es muy fuerte, por lo que deberá de dar su máximo esfuerzo en cada entrenamiento para alcanzar sus metas.
“Para mí es un escalón muy importante porque ya estás a unos pasos de Primera (División), haces un buen torneo, te toman en cuenta, puedes ir a selección, viajas como si fueras de Primera División, es más fogueo, es darte cuenta de donde estás en realidad, y es muy importante este torneo porque siento que es el trampolín para llegar a Primera División.
“Soy consciente que todo lleva un proceso, puedes sacarte la lotería y mañana debutar o tener que esperarte, lo que siempre tengo presente es que tienes que estar atento, no dormirte para cuando te toque (la oportunidad) aprovecharla, sé de algunos que se desesperan, tienes que aceptar ese hecho y más en una posición como la de portero, que hay muchos muy buenos aquí en Chivas y tienes que esperar tu oportunidad para atacar como un león para no desaprovecharla, la clave está en la paciencia”, indicó.
El guardameta rojiblanco tiene muy claras sus metas a corto, mediano y largo plazo, para las que se prepara intensamente en el día a día del juvenil Rebaño con un trabajo intenso y disciplina, que son factores fundamentales para poder alcanzar sus sueños, y sobre todo consciente que no será fácil, pero con la determinación de dejar de luchar por ellos.
“A corto plazo, si se puede considerar a corto plazo el torneo, es ser campeón, venimos de ser campeones en Sub 17, no podemos decir que no se puede hacer, ser campeón es mi objetivo de equipo, individual es ser convocado a una selección nacional.
“A mediano plazo ascender de categoría, tratar de subir lo más que se pueda, no sólo avanzar una categoría, si se puede saltar categorías, perfecto.
“A largo plazo, obviamente llegar a Primera División y trascender y buscar ir a Europa a un club grande, no es algo que se pueda poner uno exigente, pero primero está aquí para poder lograr eso”, finalizó el guardameta Sub 17 de Chivas Alejandro Cruz Vidrio.
Fotos: Simon Barber.