Han transcurrido cinco semanas desde que el delantero Rafael Márquez Lugo fue operado para implantarle injerto de cartílago en su rodilla izquierda por la ruptura meniscal que padecía, y al día de hoy afortunadamente ha mantenido un buen paso en su proceso de rehabilitación, ya que recién le fue autorizado el apoyo parcial, es decir, con una sola muleta, lo cual es un reflejo fiel de que ha tenido un avance favorable conforme a lo pronosticado por el Doctor Rafael Ortega, Director de los Servicios Médicos de Chivas.
"La verdad es que poco a poco vamos quitándonos las muletas, ya nada más estoy con una, será cuestión de otra semana para que quizá ya pueda apoyar totalmente, por eso claro que uno está más contento, esperando que la evolución del injerto se mantenga bien; los ejercicios no han variado mucho, pero la intensidad sí ha ido en aumento, tanto en la alberca como en la bicicleta.
"He sentido muy bien la rodilla, quizá todavía sea prematuro para pensar en que todo quedó bien, porque más adelante nos iremos dando cuenta de eso, pero estos días que he empezado a apoyar un poco más la pierna no he sentido nada de dolor y eso por supuesto que es un buen síntoma de que vamos por buen camino", expuso al terminar con su actividad de este jueves en las instalaciones de Verde Valle.
Si bien el experimentado atacante rojiblanco ha expresado en anteriores ocasiones que no ha sencillo sobrellevar este largo periodo de rehabilitación por el par de cirugías que se le han practicado durante el año, aunado a la situación por la que el conjunto más mexicano y popular del país atraviesa en el Torneo de Apertura 2014, aseguró que no puede permitirse el intentar 'comerse' tiempo con tal de volver cuanto antes.
Y es que un factor que ha sido clave para que mantenga esa ecuanimidad y aplomo que lo caracteriza, aunado a que le ha inyectado una enorme dosis de ánimos y entusiasmo para seguir mirando hacia adelante y esmerarse al 100 por ciento en cumplir con cada etapa de su programa de labores, es el nacimiento de su primogénita hace justo una semana, lo cual le ha hecho esmerarse aún más en este proceso.
"A pesar de la situación, tanto de estar en este largo proceso de rehabilitación como el momento que vive el equipo, estoy muy contento por la llegada de mi nena, que es una motivación más para recuperarme y salir de esto, a veces entra un poco la ansiedad por ver que los resultados no han acompañado al grupo y uno quiere ayudar, de momento lo hago alentándolos desde acá, con la mentalidad tranquila y ser cauteloso para no arriesgar nada", finalizó Márquez Lugo.
