El encuentro personal entre la afición y los jugadores del Rebaño Sagrado en Estados Unidos fue posible a Pepsi, patrocinador oficial del conjunto rojiblanco, que hizo posible que los seguidores del equipo más popular de México pudieran disfrutar de convivir con sus ídolos en firmas de autógrafos y en los momentos posteriores a los partidos disputados en California y Texas.