Ciudad de México.- El día más esperado de la campaña llegó y sin importar que el Guadalajara no estuviera de local, porque la parte de la gran familia rojiblanca que radica en el Distrito Federal lo hizo sentir como en casa y una vez más demostró que la Capital es Rojiblanca, ya que lo impulsó todo el partido para llevarse el Clásico Nacional frente al América por X-X la tarde de este sábado en el Estadio Azteca, en actividad de la fecha 10 del Torneo de Apertura 2015 de la Liga MX.
Desde antes de que diera inicio el enfrentamiento entre los dos cuadros más representativos del balompié nacional, los seguidores del conjunto más mexicano y popular del país no dejaron de entonar los tradicionales cánticos de apoyo que se escuchan en cada plaza de la República para alentar a la escuadra tapatía, lo cual aumentó de decibeles una vez que sus 11 guerreros de la Perla de Occidente saltaron al césped del Coloso de Santa Ursula.
Sin dejar de gritar, de aplaudir y de ser ese jugador número 12 que el mismo entrenador Matías Almeyda dijo esperar de los aficionados del Guadalajara, el primer estallido rojiblanco en las gradas sucedió al minuto 14 y todo gracias al capitán, gracias a su incansable empuje y a estar siempre enchufado con las acciones del encuentro, pues Omar Bravo aprovechó un pase retrasado mal cedido por Osvaldo Martínez para sorprender a la zaga y a Moisés Muñoz y poner en ventaja a los 'visitantes'.
El 0-1 en el marcador por supuesto que conllevó mayor volumen, intensidad y entusiasmo en la voz de cada uno de los miles de simpatizantes de la causa tapatía en el Azteca, quienes no dejaron de impulsar a su equipo con el "¡Chivas, Chivas!" de manera constante. Aunque el acérrimo rival apretó al frente en busca del empate, tanto en la cancha como en la tribuna los rojiblancos se mantuvieron firmes, unos para solventar los embates de los emplumados, y otros para alentar y cobijar a sus jugadores.
Minuto 37, la locura total. Por si hubiera sido poco el respaldo que le estaban brindando al cuadro de sus amores en la cancha, una acción de perfecta manufactura entre Carlos Fierro, Raúl López y Omar Bravo, que terminó por definir el último de ellos, causó la algarabía al interior del equipo y de sus miles de seguidores presentes en el estadio. "Mi corazón, pintado bicolor, te quiere ver Campeón, contigo festejar, 100 años muchos mas , con fiesta y carnaval celebrara el pais…".
Pese a que las Águilas recortaron la distancia en el electrónico por la vía penal gracias a un cobro potente de Osvaldo Martínez y que la jugada desencadenó el tanto del equipo local dejó al Rebaño con un hombre menos por la expulsión de Carlos Salcido, fue cuando más fuerte se escuchó el apoyo de su elemento número 12 en las gradas. "¡Chivas, Chivas!" no dejó de sonar durante el resto del primer lapso.
En la parte complementaria el guión no varió. La parte de la gran familia del Guadalajara que se dio cita en el Coloso de Santa Ursula alentó con todas sus fuerzas a los 10 caudillos vestidos a rayas sobre el campo que aguantaron estoicamente la presión que por momentos generó la oncena azulcrema sobre el arco de Antonio Rodríguez, lo cual por supuesto tuvo eco en las miles de gargantas que no se callaron ni un solo minuto. "Rebañooooo, Rebaño, dale Rebañooooooooo".
Equipo y afición fueron uno solo durante cada instante del segundo tiempo. Las Águilas intentaron por todos lados conseguir el tanto del empate, pero el Rebaño Sagrado exhibió que su unión es tan fuerte dentro y fuera del campo que logró solventar el peligro sobre su meta. "Ole, ole, ole, ole, ole, ole, ola, ole, ole, ole, cada día te quiero más, yoooooo soy de Chivas, es un sentimiento que no va a parar"… así fueron los últimos instantes del partido, así se ganó el Clásico, el Guadalajara más unido que nunca con su afición y demostrando por enerva vez que la Capital es Rojiblanca.
Omar Bravo, Jorge Enríquez, Isaac Brizuela y Edwin Hernández fueron los primeros en acercarse a la grada sur del Estadio Azteca para celebrar son su afición el tremendo triunfo que consiguió ante su acérrimo rival en patio "ajeno", porque con el corazón por delante y con la confirmación de que un rojiblanco nunca se raja pese a la adversidad, la familia de Chivas hizo suya la edición del Clásico Nacional del Torneo de Apertura 2015, lo cual además significó el tercer triunfo al hilo bajo el mando de Matías Almeyda.
POSICIONES
Posición | Equipos | Partidos | Puntos |
---|---|---|---|
8 | 16 | 26 | |
9 | 17 | 25 | |
10 | 16 | 21 | |
11 | 16 | 18 | |
12 | 17 | 17 |