La fortaleza de Emilio

El sueño de muchos niños es ver jugar a su equipo favorito en su casa y Bryan Emilio Gutiérrez Hernández tuvo la fortuna de que la primera vez que asistió a un estadio fue para ver a sus queridas Chivas en el Omnilife, pues aunque vive en una ciudad en la que cuentan con un conjunto en el Máximo Circuito como lo es Tijuana, nunca ha estado presente en un encuentro en el inmueble fronterizo.

Emilio fue invitado por la Fundación Gente que Cuida a la Gente y Chivas para ser el embajador de la Liga MX en el encuentro de la Jornada 15 en el que Guadalajara recibió a Pachuca para cumplir con una de sus más grandes ilusiones, conocer a los jugadores del Rebaño Sagrado y el Estadio Omnilife.

Al joven seguidor del Guadalajara le fue diagnosticado un osteosarcoma en el hombro derecho en mayo del 2014, fue operado y continúo con su tratamiento, pero al realizarle nuevos estudios en este 2015, los doctores confirmaron la mala noticia, el cáncer regresó a pesar de los esfuerzos por erradicarlo y ahora analizan cuál es la mejor alternativa para atacarlo.

El osteosarcoma es un cáncer óseo que aparece por lo general en cualquiera de los extremos de la diáfisis de un hueso largo; se trata del octavo tipo más frecuente de cáncer infantil y su localización más habitual es la región de la metáfisis de huesos tubulares largo.

La motivación de Emilio por estar en el Estadio Omnilife y conocer a los integrantes del Rebaño Sagrado será una inyección de ánimo para retomar el tratamiento para combatir su enfermedad cuando regrese a Tijuana, por lo que Chivas y la Fundación Gente que Cuida a la Gente continuarán con esta ardua labor de apoyar a las personas que lo necesiten.

El pequeño aficionado del Rebaño compartió la emoción que le provocó ser el embajador de la Liga MX en el partido de Chivas vs, Pachuca, así como de dónde nació su afición por el equipo rojiblanco; además envió un mensaje a los niños que como él, luchan día a día contra esta terrible enfermedad.

“Se siente increíble, nunca pensé que me pasaría algo así, en espacial viviendo en Tijuana, tan lejos de Guadalajara, siempre quise estar en un estadio y no me imaginé que el primer partido que viera en vivo sería el de mi equipo Chivas. Mi papá le va a las Chivas y yo me ponía a ver los partidos con él, me gustó como jugaban, aparte la tradición de siempre tener puro mexicano.

“Ese camino es triste pero siempre vas a tener más alegría, siempre vas a disfrutar de más cosas, no crean que el tratamiento va a ser solamente sufrimiento y tristeza, siempre llegará un día en el que te sorprendas”, concluyó con un tono de esperanza en sus palabras.