Recuerdo de un gol de antología

El encuentro entre Chivas y Pumas fue y será siempre uno muy especial para el ex delantero Luis García, pues lo vivió con ambos clubes y por ello sabe perfectamente lo que representa este partido para la afición, además de que en su caso fue el escenario de momentos muy relevantes en su carrera profesional, como aquel que protagonizó como rojiblanco en el cotejo de Vuelta de la Semifinal del Torneo de Invierno 98.

Como si hubiera sido ayer, García Postigo, quien debutó con la UNAM en Primera División en la campaña 1986-87, recordó aquella acción que definió luego de que Ramón Ramírez habilitara a Ricardo Peláez dentro del área por derecha y éste mandara un centro al corazón de la misma, donde él se levantó para rematar de 'chilena' y convertir el tanto con el que la escuadra tapatía se impuso por 1-0 ante los universitarios (2-1 global) en el Estadio Jalisco para instalarse en la contienda por el título.

"Sin lugar a dudas fue algo fabuloso, además sólo le pude meter dos goles a Jorge Campos durante mi carrera, uno con Monarcas en un duelo ante Tigres y ese tanto de la Semifinal, que aparte fue como una rana invertida increíble como de lucha libre, con el que avanzamos a la Final. Siempre fui muy respetuoso de los lugares donde trabajaba, si bien es cierto que tuve mi origen en Pumas, me acuerdo que ese día me puse como un loco furibundo y casi me salto a la tribuna cuando anoté, fue uno de los goles más importantes que metí en mi trayectoria, aunque estéticamente estuvo del carajo, pero fue una linda anotación que como resultado nos dio el pase a la Final", rememoró con su característica irreverencia y carisma.

Además de dicho capitulo específico en su etapa en el redil, el atacante reconoció la trascendencia y el valor que implicó haber vestido los colores del Rebaño Sagrado durante tres torneos, del Invierno 98 al Invierno 99, en los cuales registró 20 goles en 56 encuentros, pues relató que además de haber sido parte de una gran camada de futbolistas tanto dentro como fuera de la cancha, su estadía en la escuadra más mexicana del país es una de las experiencias más gratificantes y satisfactorias que le dejó su vida como jugador profesional.

"Fue uno de los máximos orgullos en todo sentido, fui sumamente feliz, esa es la realidad, estuvimos en un trabuco, era un equipo maravilloso; sin lugar a dudas éste es el club más popular, si no le vas al Guadalajara puede ser tu segundo o tercer equipo, lo quieres, es un equipo entrañable, pasé aquí momentos extraordinarios, llegamos muy lejos deportivamente y más allá de eso, en el rubro humano, había una cordialidad extraordinaria, una forma de relacionarnos muy buena. Es más, cuando tuve que irme a Monarcas sufrí muchísimo, porque como lo he dicho fui verdaderamente feliz en la etapa que me tocó estar aquí y por eso siempre estaré agradecido con el Guadalajara", finalizó García Postigo, Mundialista en Estados Unidos 94 y Francia 98.