El mejor ejemplo para lograr su sueño

Cancún, Q. Roo.- Por segundo semestre consecutivo el equipo del Inter Playa ha vivido una experiencia inolvidable y que sin duda ha alimentado considerablemente la ilusión de sus jugadores por algún día llegar al lugar de las figuras con las que han entrenado durante 10 días, ya que de nueva cuenta este club apoyó al Rebaño Sagrado en su labor de pretemporada para que Matías Almeyda pudiera desarrollar el plan de trabajo de su equipo de la mejor forma posible.

Incluida la transportación de Playa del Carmen a Cancún y viceversa en el autobús oficial de Chivas, lo cual también sirve para alentar a estos jóvenes de categoría Sub 17 a no bajar los brazos y continuar por buen camino su proceso formativo para aspirar a ser elementos de primera división, estos chicos han comprobado la intensidad con la que entrena el Guadalajara en esta etapa previa al torneo y la determinación con la que cada uno de sus integrantes se prepara para competir al más alto nivel, hecho que representa un importante aliciente para querer estar ahí.

“La verdad es que es una gran experiencia porque no cualquiera tiene esta oportunidad de trabajar con un equipo grande como lo es Chivas, ahora conocemos cómo trabajan y nos ponen de ejemplo que hay que dejar todo en la cancha cada día para salir adelante y triunfar”, manifestó el mediocampista Uriel Iuitz al respecto.

Además del impulso anímico en el rubro profesional, otro aspecto que estos jóvenes del Inter Playa han podido vivir en carne propia es el conocer a los jugadores como personas, platicar con ellos y darse cuenta de que antes que jugadores son buenos seres humanos, un factor clave al interior de Chivas y que ejemplifica parte de los valores que constituyen al club rojiblanco. 

“Me gusta la forma de ser de todos porque son muy humildes, te dan ganas de ser como ellos y de entrenar al máximo, algunos de ellos son mis ídolos, (Carlos) Salcido es muy bueno, ha estado en Europa, ‘Chofis’ es muy hábil y rápido, me encanta como juega y también su forma de ser, es muy sencillo”, concluyó Uriel Iuitz.