Trato que fortalece

El mayor activo de un equipo sin duda alguna son los jugadores, por lo cual para procurar que se mantengan en su mejor estado físico es necesario que lleven a cabo rutinas que les ayuden a fortalecerse para evitar lesiones en la medida de lo posible, y si a pesar de todos los cuidados preventivos estás se presentan, el área de Kinesiología y Rehabilitación es la que se encarga de recuperar de la mejor forma y lo más rápido que se pueda a los futbolistas para que su ausencia de las canchas sea breve.

“Básicamente nos encargamos de la recuperación de los deportistas que sufren alguna lesión típica de un deporte de contacto como es el futbol, formamos parte de un sistema de trabajos preventivos para que los jugadores minimicen el riesgo de lesionarse a través de la ayuda de los preparadores físicos Guido Bonini e Ignacio Ayaso, que nos dejan un espacio al finalizar los estiramientos para hacer terapias de autoliberación miofascial y automasaje con algunos elementos para trabajar estaciones de propiocepción, que nos ayudan para la prevención”, explicó Gustavo Witte, coordinador de dicho departamento del club Guadalajara.

“Cuando cualquier jugador siente alguna molestia, sobrecarga o tiene una deficiencia en algún sector del cuerpo, el médico hace su diagnóstico y nosotros vemos a través de un trabajo en conjunto y bien comunicado para que esa dolencia o molestia que tenga no pase  mayores. En el caso de la reincorporación de un jugador al trabajo grupal después del periodo de cicatrización, hay que tener una buena coordinación con los ‘profes' para ver qué ejercicios hacen ellos y cuales son los que el jugador puede ir integrando para tener progresiva y paulatina incorporación al campo para que no haya una gran diferencia de no tener actividad a la competencia propia del futbol”, añadió.

Además de Gustavo Witte, esta dependencia de la institución tapatía está integrada por Antonio Jiménez, Carlos Chávez y María Madrigal, quienes se encargan de manera especializada de cada una de las áreas que tienen que cubrirse para que el futbolista lesionado tenga una evaluación y un proceso de rehabilitación con la mayor certeza de que la recuperación de todas sus capacidades sea al 100 por ciento.

“Cada uno tiene una tarea específica, Carlos es el encargado de operar la máquina criogénica que utilizamos pre y post estímulo, la cual está demostrado científicamente que es muy útil para la recuperación y prevenir lesiones, Toño y Mary están conmigo en la terapia manual; además Toño y Carlos se encargan también de la actividad y ejercicios específicos que deben de hacer en el gimnasio pre estímulo; yo soy quien hace las valoraciones kinésicas para ver la eficiencia y el déficit de musculatura o segmento corporal y la reincorporación del jugador con el resto de sus compañeros, estamos muy coordinados en la función que tiene que hacer cada uno. En los viajes y en la pretemporada reacomodamos las actividades que tenemos que hacer y nos adaptamos al medio que nos toca trabajar”, relató.

“Nos apoyamos en medicina basada en evidencia que es a través de protocolos, eso es una guía, más el tiempo de duración del proceso de cicatrización, es un modelo para saber el pronóstico para recuperar al jugador que ya esté 100 por ciento en cancha, por supuesto que hay organismos que se recuperan más rápido, hay otros que son más lentos, hay cicatrizaciones diferentes en todo ser humano y eso lo tenemos que contemplar y son variables a la hora de dar un pronóstico de un jugador en específico conociéndolo cada vez más; hay protocolos que tratamos de actualizar constantemente, porque en la rehabilitación como una rama de la medicina va evolucionando y hay nuevos métodos de tratamiento que pueden acelerar la recuperación o hacen que sea la idónea”, finalizó el especialista.