El 3 de enero de 1957, con una solitaria anotación de Salvador ‘Chava’ Reyes ante el Irapuato en la cancha del estadio Felipe Martínez Sandoval (Parque Oblatos), se escribió un capítulo triunfal de la gloriosa historia del Club Guadalajara, al obtener su primer título del Futbol Mexicano en la Temporada 1956-57, el cual marcó el inicio de una época dorada, repleta de éxitos y que dio paso al nacimiento del único equipo Campeonísimo. Hoy se conmemoran 61 años de este importante logro para la institución rojiblanca.
El Guadalajara escribió con letras de oro su nombre al ganar su primer título de Liga con una generación de futbolistas que conseguiría siete campeonatos entre 1957 y 1965 para convertir al Rebaño Sagrado en el máximo ganador del balompié nacional. Las cifras de ese campeonato fueron extraordinarias: 47 goles en 24 partidos, sólo 22 recibidos y Crescencio “Mellone” Gutiérrez campeón goleador con 19 dianas. La historia del Campeonísimo empezaba, una etapa de gloria y alegría plasmaría la esencia de once mexicanos sobre el terreno de juego que generó respeto en todos los rivales.
El equipo que consiguió este valioso triunfo para el Guadalajara estuvo conformado por: Jaime “Tubo” Gómez, Pedro “Chato” Nuño, Guillermo “Tigre” Sepúlveda, José “Jamaicón” Villegas, Juan “Bigotón” Jasso, Francisco “Panchito” Flores, Isidoro “Chololo” Díaz, Salvador “Chava” Reyes, Crescencio “Mellone” Gutiérrez, Sabás Ponce y Raúl “Pina” Arellano; como alternativas apoyaron Ángel Vázquez con 14 juegos jugados, Tomás Balcázar con 4 y Sergio Pacheco Otero con 2, con Donald Ross como Director Técnico.