La historia de Néstor Díaz ha estado siempre ligada al futbol, ya que su padre militó en los Leones Negros en la Primera División A, por lo cual en su casa se simpatizó con los colores de los Melenudos, pero el hecho de querer abrirse camino propio en esta profesión, le llevó a enamorarse del rojo y el blanco, colores que lo han identificado e impulsado durante su trayecto a la Primera División, durante el cual incluso tuvo que cambiar de posición en el campo.
El centrocampista posee cualidades que lo han convertido en un referente del Rebaño Sagrado Sub 17, ya que es un futbolista inteligente, que toca fácil, con buena lectura de juego y excelente golpeo de balón; además, es un líder nato, cuenta con una tenacidad inquebrantable y ha mostrado mucha madurez, elementos que le hicieron portar el gafete de capitán en el más reciente título de Chivas en esta categoría.
El origen
“Mi papá (Néstor Díaz) jugó en la UdeG (en la Primera A), por eso ya tenía en la sangre el gusto por el futbol, y cuando estaba chico jugaba con mis primos, siempre me ha gustado patear balones. A los 4 años empecé a jugar en el equipo del barrio, mi mamá me llevó a una escuela que se llama Occidente, estaba a 5 minutos de mi casa, jugué ahí desde los 4 años hasta los 8; después, un amigo de mi papá me llevó a la Escuela Chivas Morelos, ahí estuve como 6 meses porque los visores del club me invitaron a entrenar a Verde Valle a los 9 años”.
Su recorrido por el redil
“Cuando llegué se estaba abriendo mi categoría, había muchos niños y quedamos muy pocos de los que empezamos desde el primer día. Yo llegué como defensa central, pero después me pusieron de lateral, posición que me gusta mucho. En un torneo en Houston el 'profe Pichas’ (Francisco Javier Robles) me puso de contención y me dijo que tenía condiciones, desde ahí no la he soltado y me ha gustado; en ese tiempo estaba en la Novena División y nos preparábamos para una Copa Chivas, desde entonces he llevado mi proceso por todas las categorías hasta la Sub 17”.
Predicar con el ejemplo
“Ser capitán te exige una mayor responsabilidad, no me ha pesado, si cuesta, pero todo lo superas con trabajo, tienes que ser una guía para tus compañeros, ser en quien se apoyan cuando no están bien, eso me motiva, eso es parte de ser capitán, servirle al grupo”.
Trasciende fronteras
“Mi primer torneo fuera del país fue en Estados Unidos, luego me tocó ir a la IberCup en España y Portugal, después fui a República Checa, Italia y Japón. En esas competencia te motivas, cuando viajaba iba pensando en dejarlo todo, que te vean y que se den cuenta que los mexicanos desde temprana edad somos buenos, que tratamos de sobresalir aunque enfrentemos a rivales más grandes y desarrollados, vas agarrando experiencia; en lo personal aprendí a tomar decisiones rápidas y sacarle provecho a mis errores para crecer, también pude identificar a los rivales de mejor forma para hacerles daño y a ayudar a tu equipo lo más posible desde mi posición”.
Identidad rojiblanca
“Me acuerdo que a los 7 años fui a ver mi primer partido de Chivas en el Estadio Jalisco, fue contra el Puebla, el ver cómo la gente alentaba me emocionó mucho y desde ahí dije ‘yo quiero ser de Chivas’, me compraba mis camisas y quería todo del equipo. En mi casa mi hermano y mi mamá ya son Chivas, mi papá aún se resiste y sigue a la UdeG”.
Respaldo total
“El futbol es algo que disfruto y me apasiona mucho, mi mamá me ha enseñado a seguir mis sueños y alcanzarlos, que no hay límites, mis papás me apoyan, pero mi mamá es mi mayor motivación, cuando pienso en tirar la toalla, es importante ver de dónde vienes y hacia donde vas”.
Las adversidades
“Cuando estaba pequeño las idas en camión a Verde Valle eran duras, hacía casi 2 horas para llegar, salía de la primaria o después de la secundaria y me iba con mi abuelita, que era la que me llevaba, comíamos en el tren o en el camión para llegar a tiempo, era difícil porque siempre fue ‘córrele que se nos va el camión’, pero eso me sirvió para darle el debido valor a las personas que hacen esos sacrificios por mí, mi papá (Néstor), mi mamá (Guadalupe) y mis hermanos (Sebastián) y (Camila), le sigo agradeciendo a mi abuelita que me haya llevado a entrenar porque me hizo ver que siempre hay alguien ahí para mi y eso es algo que me fortaleció desde entonces”.
Los triunfos rojiblancos
“He sido Bicampeón en Sub 13, en Sub 15 me quedé en la orilla, pero afortunadamente me tocó ser el capitán de la Sub 17 y poder el levantar el trofeo, todo eso significa un reto más y me impulsa a ir por otro”.
Cuando el tesoro se asoma
“El hecho de que te llamen a entrenar con Primera División te da hasta ansias de que ya empiece el trabajo, es una inspiración buscarte un lugar ahí, es una motivación enfrentar a jugadores más grandes y el poder hacerlo me deja satisfecho. Me he acercado al ‘Gallito’ (Vázquez) y me ha dicho que no me diera el tiempo de descansar, pues mientras ellos (los de Primera) están descansando, yo tengo entrenar el doble para poder alcanzarlos”.
La referencia
“Me gusta ver a Kevin De Bruyne, es un jugador muy talentoso, que juega fácil, es rápido, sabe lo que tiene que hacer antes de que le llegue el balón, tiene buena visión de campo y un excelente golpeo de pelota, me gustaría tener su serenidad y esas condiciones, para lo cual hay que trabajar al máximo cada día”.
Proceso Tricolor
“Mi primer llamado fue a la Sub 16, yo estaba entrenando y se me acercó el 'profe' Ramón (Baeza) al final y me dijo ‘te tengo una mala noticia’, yo me asusté, pero era una broma, cuando supe que iba a la Selección se me puso a piel ‘chinita’, era algo que quería conseguir; me acuerdo que cuando llegué a mi casa le hablé a mi mamá para que me comprara bóxers, desodorante y algunas cosas más porque al otro día viajaba para la concentración en CDMX”.
“Recuerdo que esa semana en el CAR entrené muy fuerte y me eligieron para el grupo que iba a viajar. Después estuve en otra convocatoria y a principios de 2019 me llamaron y fui a un torneo en Japón, al final no me tocó ir al Mundial de Brasil, pero sigo esforzándome al máximo para ser constante en la Selección”.
Lo que viene
“El haber jugado una Final en el Estadio Akron y levantar el trofeo Sub 17 fue de las cosas más bonitas que me han pasado, pero ahora voy en busca de un título mayor, Sub 20 y luego Primera División. Quiero ganarme la titularidad en Sub 20 y ser Campeón, después ir a una Pretemporada con el plantel de Primera División y estar en el radar del cuerpo técnico para debutar; también quiero jugar un Mundial como capitán, tengo muy claro el enfoque".
