Una de las muchas anécdotas épicas que Guillermo Sepúlveda protagonizó con el Guadalajara durante la época del ‘Campeonísimo’ se dio en un encuentro frente al Toluca, el domingo 27 de agosto de 1961.
En aquel partido de la Jornada 11 de la Temporada 1961-62, el ‘Tigre’ sufrió un desgarre de muslo durante el primer tiempo, lesión que paulatinamente lo mermó conforme transcurrió el juego. Al medio tiempo el defensa no soportaba el dolor, por lo que Javier de la Torre se vio obligado a mover a sus jugadores en la cancha (cabe recordar que todavía no se podían hacer cambios, eso se dio hasta 1966).
La decisión del ingeniero fue bajar a Juan ‘Bigotón’ Jasso a la central y que Sabás Ponce y Salvador Reyes jugaran en la media y también apoyaran a Javier Valle, para que así Sepúlveda se colocara de centro delantero y prácticamente estuviera de poste.
Aunque el choque contra los Diablos Rojos fue muy cerrado, el momento cumbre se dio al 58’, cuando Isidoro ‘Chololo’ Díaz mandó un servicio que la defensa choricera no pudo cortar ni Cresencio ‘Mellone’ Gutiérrez alcanzó a rematar, pero el ‘Tigre’ apareció para conectar el esférico de ‘palomita’ y vencer al guardameta Florentino López para el 1-0. ‘Chava’ Reyes se encargó de finiquitar el compromiso al 81’ al marcar desde los 11 pasos.
Ya con el 2-0 y al darse cuenta de que Sepúlveda casi no podía moverse, el ingeniero de la Torre le ordenó que saliera del campo al 83’ y así dejó escrita una de sus grandes historias de garra y entrega por los colores del Guadalajara.
