De a poco, pero con pasos firmes, el Guadalajara ha retomado la memoria futbolística y en su partido de la Jornada 13 ante Puebla logró mostrar muchas de las cosas que lo llevaron a alcanzar su mejor versión colectiva al inicio del torneo, hecho que respalda lo dicho por Pauno de que el resurgimiento del Rebaño va en serio.
¿Cómo saltó Chivas al terreno de juego?
Para iniciar el encuentro, el Rebaño utilizó un 4-3-3, que en el complemento y tras los ajustes de Veljko se convirtió en un 4-2-3-1, lo que le brindó mucho mayor control sobre las acciones para poder cerrar con calma el partido y conservar el resultado.
Las claves del triunfo:
- El rendimiento de Ricardo Marín sigue al alza y pese a que no marcó gol en este encuentro, se apuntó una asistencia más en el gol de Ronaldo Cisneros, otro atacante que se ha enchufado y que cuando complementó a Marín en el ataque hizo ver muy peligroso al aparato ofensivo del Rebaño.
- El buen momento que vive el medio campo rojiblanco. Rubén González ofreció otra notable actuación individual e incluso protegió las subidas de las laterales; cuando ‘Piojo’ Alvarado y ‘Nene’ Beltrán quedaron de interiores, el equipo manejó a placer las acciones del encuentro al retomar el juego interno y dejar de perder balones, lo que le permitió a Chivas circular la pelota con calma.
- Erick Gutiérrez reapareció luego de la lesión que lo ausentó por 3 semanas y lo hizo de buena manera, ya que le otorgó mucha agresividad a la recuperación del equipo al ubicarse como doble pivote con el ‘Oso’, con lo que pudimos comenzar a manejar mejor los tiempos del partido.
- Los ajustes sobre la marcha por parte de Veljko Paunovic fueron extremadamente atinados, pues los futbolistas que vinieron de la banca hicieron un trabajo excepcional y varios de los titulares siguen en gran nivel individual.