Un día como hoy pero de 1929 nació un hombre que años más tarde, se convertiría en un icono del Club Deportivo Guadalajara. Se trata de Jaime ‘Tubo’ Gómez, quien fuera el guardián del arco en el legendario Campeonisimo.
El histórico arquero del Rebaño nació en Manzanillo, Colima. El popular apodo de “Tubo”, contrario a lo que muchos pudieran pensar, no nació bajo los tres postes de la portería del Campeonísimo Guadalajara, sino en la duela y la red del voleibol, que fue la primera pasión del guardameta. En dicha etapa, se caracterizó por su potente remate y el gran alcance aéreo, que le permitía superar hasta un triple bloqueo.
Era el año 1948, las destacadas aptitudes de Jaime Gómez para jugar al Voleibol ya lo habían hecho merecedor de un lugar en la Selección Jalisco; colimense de nacimiento, jalisciense por adopción. La primera oportunidad para mostrarse fue el Campeonato Nacional de Primera Fuerza celebrado en Puebla. Fue precisamente ahí donde el periodista Fernando Cortés de la Peña, quien al ser testigo presencial de la categoría y poderoso remate de la pelota sobre la red, no dudo en afirmar “este jugador realmente le pega con Tubo a la pelota”.
Años después existen más vestigios de la historia de quien portaba el número uno en la oncena del Campeonísimo Guadalajara. El futbol lo atrapó y se enamoró de la portería, tanto que cambió los saltos y remates por los lances y las atajadas.
Don Jaime Gómez conquistó 22 títulos con el Campeonisimo, seis de ellos campeonatos de liga, Copa Challenger, Campeón de Campeones, Copa México. Además, Gómez disputó un par de Copas del Mundo, siendo Suecia 1958 la primera y Chile 1962 la segunda.
La inolvidable anécdota del Clásico Tapatío:
Fue un 24 de abril de 1955, cuando Chivas y Atlas se vieron las caras en un partido correspondiente al Torneo Copa Oro de Occidente. El Guadalajara llegaba como claro favorito y el marco era inmejorable, pues las gradas estaban repletas y pintadas de rojiblanco.
Apenas a los 30 segundos de arrancado el encuentro, Crescencio "Mellone" Gutiérrez ya había marcado el primer gol para Chivas, a los seis minutos Jesús "Chuco" Ponce ya había conseguido el segundo gol y un minuto después, nuevamente "Mellone" hizo de las suyas y puso el momentáneo 3-0 que validaba la superioridad de Chivas sobre Atlas.
Luego de sobrepasar el minuto 16, el goleador Adalberto "Dumbo" López ya había colocado un lapidario 4-0, sin pensar que minutos más tarde, la goleada de Chivas tendría un capitulo inimaginado, pues ante la nula llegada que el equipo de Atlas generaba hacia el territorio rojiblanco y con la muestra de superioridad que Chivas les propinaba en la cancha, el portero rojiblanco Jaime 'Tubo' Gómez se sentó en el suelo y se recargó en el poste del arco, para posteriormente ponerse a leer un cuento. Era un Memín Pingüín que le había pedido prestado a un aficionado.
Don Jaime Gómez falleció el 4 de mayo de 2008 y desde ese día, no hay un solo momento en que no se recuerde su grandeza, talento y carisma que lo caracterizó a lo largo de su vida.