Carson, California.- Chivas fue el mejor en la cancha, el mejor en ofensiva y también en defensiva, fue quien más puntos sumó en la fase de calificación y por ello, tras una cerrada final, Guadalajara es el justo Campeón del Interliga 2009.
Fue hasta la instancia de los penales cuando el Guadalajara pudo cristalizar su primer título del 2009, pues aunque se tuvo un claro dominio del partido, incluso con el marcador en contra en cierto lapso del encuentro, fue cuestión de tiempo para que gracias a su aplicación ofensiva el Rebaño primero igualara y luego definiera desde los once pasos.
Chivas arrancó el encuentro con su acostumbrado orden táctico basado en pases precisos, movilidad e ímpetu ofensivo, el cual de inmediato dio sus primeros avisos de peligrosidad a través de Carlos Ochoa, quien al bajar un balón en el área disparó con potencia, pero a la colocación del arquero michoacano Moisés Muñoz.
Impulsados por el "Chivas... Chivas" que emanaba de una tribuna prácticamente rojiblanca en plena área de Los Ángeles, Guadalajara no soltó la posesión de la pelota y por ende tuvo mayor control de partido, ya que gracias a las atinadas intervenciones de Patricio Araujo y a la anticipación de Báez y Ávila, Chivas impuso condiciones en el medio campo.
Porque si Morelia se acercó a la portería de Michel fue sólo gracias a una desatención accidental que Héctor Reynoso tuvo en una jugada en el área, cuando al intentar despejar una pelota con la cabeza, ésta tomó rumbo de gol, pero en la línea estuvo Patricio Araujo atento para impedir el gol y aún en otro contrarremate, Luis Michel también estuvo a tiempo para impedir la anotación.
Gracias al desequilibrio del "Gaucho" Ávila en media cancha, el Rebaño fabricó avances por los costados que derivaron en llegadas al arco, pero que aunado al cerrojo defensivo plantado por los Monarcas, Chivas no pudo cristalizar sus acciones ofensivas en el primer lapso.
Pero para la parte complementaria, Chivas salió con un mayor poderío ofensivo que manifestó de inmediato en constantes arribos al área michoacana, que gracias a las intervenciones de su cancerbero y su mayor acumulación de hombres en propia área impidieron que el ansiado gol llegara.
Y justo cuando Chivas apretaba aún más a Morelia, no lo dejaba salir de su terreno y mucho menos alcanzar tres cuartos de campo para generar opciones de gol, en un tiro de esquina por derecha cobrado por Hugo Droguett y a primer poste, Carlos Ochoa quiso desviar la pelota y terminó por cambiarle la trayectoria para dramáticamente incrustarla en su propia cabaña.
Aún con el marcador en contra, Guadalajara no se daría por vencido y de inmediato buscaría la forma de igualar las acciones, pues con el ingreso de Marco Fabián, el desequilibrio ofensivo de los rojiblancos aumentaría en la cancha y daría frutos en menos de un minuto.
Pues a los 66' de juego, con menos de sesenta segundos en el campo, Marco Fabián se situó en las afueras del área, observó cómo Ramón Morales envió un servicio al área que Mauricio Romero rechazó de cabeza, justo a donde se encontraba el playera ocho del Rebaño, quien sin dudarlo prendió de bolea para sacar un potente disparo que dejaría como simple espectador a Moisés Muñoz para poner el empate en el marcador.
A partir del gol, y aunado a la expulsión de Fernando Salazar por doble amarilla a los 67', Chivas tendría poco más de 15 minutos de constante y arrasador poderío ofensivo que ni Ochoa, ni Javier Hernández ni Alberto Medina lograron cristalizar para evitar la definición del título desde los once pasos.
Por lo que culminado el tiempo reglamentario, el título del Interliga 2009 y el pase a la Copa Libertadores habría de definirse en la serie de penales dado el empate a un gol generado en el tiempo reglamentario, de ahí el ambiente de tensión que emanó del graderío y que copó el inmueble de nerviosismo.
El primero en cobrar fue Carlos Ochoa, quien con gran técnica puso el primero en las redes y lo festejó mesurado; después vino Wilson Thiago por Monarcas e inclinó la serie a favor de Chivas al errar su disparo y enviarlo por encima de la cabaña de Luis Michel.
El turno fue para Marco Fabián, autor del gol del empate y quien en su oportunidad en los penales batalló en la definición, pero al final consiguió el segundo de la tanda, para que después con el cobro de Marvin Cabrera, quien anotó de derecha, continuara el mandado de Chivas.
Después vino Héctor Reynoso a cobrar con clase para dejar toda la presión en Oscar Rojas, quien pegó de derecha y anotó el segundo de su equipo, para instantes después ceder el turno a Gonzalo Pineda, quien fiel a su estilo preciso con el trato de la pelota, la puso inalcanzable para Moisés Muñoz quien se apartó del arco tras recibir el cuarto de la tanda.
Y vendría todo el peso de la responsabilidad de continuar con vida o finiquitar la serie, Hugo Droguett fue el encargado de cobrar y tras disparar hacia la derecha de la puerta, Luis Michel hizo la hombrada y atajó de forma sublime el disparo que detonó la algarabía, que le arrancó un grito ensordecedor a la tribuna y le dio el título del Interliga 2009 a Chivas.
Vendrían entonces los abrazos, las felicitaciones, las manos en alto en señal de victoria y las miles de sonrisas en las tribunas por un título más en la historia de Chivas, una presea que además de inaugurar los logros del 2009, le dio a Chivas el boleto para su quinta participación dentro de la Copa Libertadores.
Guadalajara 1-1 Monarcas Morelia
Goles
(0-1) 57' Autogol de Carlos Ochoa.
(1-1-) 66' Marco Fabián.
Penales
(1-0) Carlos Ochoa - Chivas - anota
(1-0) Wilson Thiago - Morelia - falla
(2-0) Marco Fabián - Chivas - anota
(2-1) Marvin Cabrera - Morelia - anota
(3-1) Héctor Reynoso - Chivas - anota
(3-2) Oscar Rojas - Morelia - anota
(4-2) Gonzalo Pineda - Chivas - anota
(4-2) Hugo Droguet - Morelia - falla
Árbitro Baldomero Toledo
Estadio Home Depot Center
Carson, California (27 mil asistentes).